El Estilo Oral. Concepto y Definición
Las cualidades principales del estilo oral son las siguientes:
Claridad.
Concisión.
Coherencia.
Sencillez
Naturalidad.
Estas cualidades deben cumplirse porque para que el mensaje sea seguido y aprobado por los destinatarios, es necesario que sea comprendido, ya que a un oyente no le es permitido hacer lo que hace el lector de volver sobre el mismo texto, cuantas veces sea preciso.
Claridad
En términos generales claridad significa expresión al alcance de un hombre de cultura media, pero quiere decir además pensamiento diáfano, conceptos bien digeridos, exposición limpia, es decir, con sintaxis correcta y vocabulario o léxico al alcance de la mayoría.
Dicho en otras palabras, el estilo es claro, cuando el pensamiento del que emite el mensaje, penetra sin esfuerzo en la mente del receptor.
Cuando se habla sobre un tema que no es familiar, existe la tendencia a creer que las palabras que utilizamos son comprendidas por todos.
Claro está que cuando nos dirigimos a un auditorio especializado, disertando sobre un tema de su propia especialidad, esto no es aplicable, ya que los vocablos técnicos y científicos poseen un sentido preciso y limitado.
Si el nivel de cultura general así lo exige, se debe comenzar por explicar o definir los conceptos más complicados o especializados.
Otros elementos que deben evitarse para lograr mayor claridad en el mensaje son las cacofonías, confusiones y ambigüedades, empleando la menor cantidad de veces posible, las frases complejas, porque se corre el riesgo de que el oyente se vea arrastrado a la necesidad de unir el comienzo con el final, distrayéndose en definitiva la atención como resultado de este esfuerzo.
Debe tenerse en cuenta además, que una mayor intensidad de la voz, siempre que ello se produzca dentro de límites razonables, sirve a la claridad.
Concisión
La concisión resulta de utilizar solo palabras indispensables, justas y significativas para expresar lo que se quiere decir. Esto de ninguna manera quiere decir que por conciso se entienda un estilo lacónico, ultracondensado y demasiado breve, lo que se quiere decir es que la concisión es enemiga de la verborrea, de la redundancia, del titubeo expresivo, de las muletillas (eh..., este..., uh...), porque todo esto obstruye los canales de la comunicación y el mensaje no llega adecuadamente y en ocasiones hasta no llega al auditorio, receptor o destinatario. Se expresa lo que tiene valor real de comunicación, eliminándose todo lo que sea banal y vulgar, todo lo que pueda desagradar a un público por poco exigente que éste sea. Para mí es absurdo abusar de la atención de un auditorio durante una hora, cuando el tema puede desarrollarse y agotarse en media hora.
Coherencia
Cuando se habla para un público, cuando se comunica oralmente, el orden de las ideas ha de ser tal, que el oyente no se vea precisado a coordinarlas en su cerebro. Las relaciones entre las ideas expuestas deben ser lógicas, y las contradicciones, evitadas. Cuando el emisor, orador o conferencista esté expresando puntos de vista personales, debe prevenir a quienes les escuchan, si va a exponer seguidamente, el punto de vista de otra persona, porque de lo contrario, inducirá a error y perturbará a su auditorio.
Sencillez
La sencillez es otra condición o cualidad del buen estilo en la comunicación oral, que se refiere tanto a la composición de lo que usted habla, como a las palabras que emplea. La sencillez es huir de lo enrevesado, artificioso y complicado.
Naturalidad
Usted es natural cuando se sirve de su propio vocabulario, de su habitual modo expresivo. Hablar con naturalidad es buscar que las palabras y las frases sean propias dentro de lo que el tema exige, sin afectación, ni rebuscamiento. No quiere decir que al hablar con naturalidad uno no hable elegantemente. Un buen orador podrá alcanzar las más altas cimas de la belleza, si sabe y puede conjugar lo natural con lo preciso, procurando siempre no abandonar la sencillez y exactitud.
4 comentarios
Taylor Rodríguez -
felix tenorio -
isandra perez -
isandra perez -